Las 101 cagadas del español. María Irazusta

Captura de pantalla 2017-12-04 16.14.01.pngUna vez pasas el control de un aeropuerto cada cual vaguea por aquella sección que más le atrae a la espera del embarque y siempre y cuando quede algún detalle por incorporar es posible, como en mi caso, que tras valorar la opción de comprar algo de embutido bilbaíno, membrillo de la zona, o una Virgen de Begoña a precios nada benditos, acabe hojeando un libro a modo de recordatorio entorno a la gastronomía vasca. Si en esas se te presenta una oportunidad amena con la que instruirse en los entresijos del español y entretener el vuelo es tan difícil resistirse como dejar un pincho de lado.
En sus páginas se puede encontrar sentido a las típicas frases: Más feo que Picio, No ha venido ni el Tato, El corral de la Pacheca o El coño de la Bernarda. También cómo el paso del tiempo modifica el significado de las palabras y así: Álgido pasó de ser “muy frío” a punto “culminante” o Enervar que fue “debilitar” mucho antes que “poner nervioso”. Ayuda a entender redundancias repetitivas como deambular sin rumbo, puños cerrados, cita previa, nexo de unión, crespón negro o persona humana. A su vez se puede encontrar el sinsentido al uso del grafismo @ para evitar problemas de género ya que la escritura debe estar al servicio del habla y ese signo no va unido a sonido alguno o bien lo innecesario del empleo de formulas desdobladas los/las tan manido últimamente para evitar discriminaciones.
Su lectura es como un pincho, da gusto al paladar pero no sólo de sabores vive el hombre.

 

El disparatado círculo de los pájaros borrachos, Juan Aparicio-Belmonte

Captura de pantalla 2017-12-04 16.08.58.pngEntretenida sí que es. Disparatada puede que parezca si te pierdes en ella con sus saltos de un personaje a otro, de un tipo de narrador a otro, de una aventura que se solapa con la otra a cual más inverosímil. Pero al margen de ello no deja de ser un ejercicio de imaginación con una hoja de ruta muy bien establecida en forma de carrusel en el que escritor, protagonista, personajes principales y secundarios entran y salen de la realidad a la ficción de la propia novela que compone el propio narrador lo cual en ocasiones puede despistar al lector. Como lectura refrescante entre otras más densas está muy bien y como opción juvenil también.

 

Demasiada felicidad, Alice Munro

Captura de pantalla 2017-12-04 16.00.31.pngDemasiada felicidad, tanta, debió embargar a Alice Munro, cuando cayó en sus manos la historia de Sofía Kovalevsky, que decidió escribir el cuento que da título al libro. Novelista, matemática, primera mujer contratada como profesora de universidad en Europa, en la actualidad un cráter lunar lleva su nombre, a Sofía también le embargaba demasiada felicidad camino de Estocolmo al tiempo que incubaba una neumonía que acabaría con ella. Relato biográfico que nada dista de aquellos otros de ficción incluidos en este libro en los que familias se desestructuran cuando la felicidad que les embargó desaparece o cuando una de las partes se llena de la misma fuera de casa, los hijos siguen su curso, los trabajos cambian, las distancias aumentan y la vida pasa, como la de Kovalevsky, en busca de la felicidad, que escapa entre los dedos que tratan de agarrarla en esos pequeños instantes que nos embarga dejando ese fondo de tristeza al comprobar que irremediablemente el tiempo pasa tal y como ocurre con los cuentos de Munro en los que sin darte cuenta ya se han acabado.

Alimento para moscas, Jon Obeso

Captura de pantalla 2017-12-04 15.52.37.pngLa portada y el título son tan sugerentes como lo escrito. Un entomólogo vive aislado cerca de unas cuadras realizando su tesis. Los caballos que sirven de esparcimiento y educación a los jóvenes del pueblo enferman mientras sus habitantes se dedican a la labor de cantería. Desde su atalaya el investigador relata la vida de los ciudadanos en la que sus quehaceres diarios de comunicación con el resto de congéneres y sus formas de reproducción poco distan de los comportamientos de los mosquitos a estudio.

 

Nocturnos, John Connolly

Captura de pantalla 2017-12-04 15.48.47.pngConjunto de 19 relatos donde interviene lo sobrenatural. Unas veces porque los miedos sobredimensionan la realidad y otras por no tener miedo a las otras realidades. Para aquellos que gustan de este tipo de lecturas, Connolly ofrece reinterpretaciones de historias ya contadas, su propia versión de leyendas que se pierden por pasillos tenebrosos o en simas sin luz, así como grotescas formas que adopta el maligno para tratar de poner al lector en trance.

Ronda nocturna. Mijail Kuráyev

Captura de pantalla 2017-12-04 15.44.40Situada en Petersburgo de la década de los 60 la ronda describe a través de un paseo nocturno y de forma poética la ciudad. Para ello hace uso la voz de un personaje que anteriormente formó parte del aparato de represión estalinista. Se mezcla así la vivencia que aporta la ciudad junto con las experiencias de arrestos e interrogatorios debido a las purgas que eran pan de cada día en aquellas épocas por parte de un policía que las narra tal cual, sin sentimiento alguno de culpabilidad pues era lo que había que hacer por orden, sin complicarse en juicios morales al respecto.

La Batalla de Tebas. Naguib Mahfuz

Captura de pantalla 2017-12-04 15.40.04.pngLa batalla de Tebas (hoy Luxor) es una novela histórica entretenida que permite viajar por El Nilo como columna vertebral de los enfrentamientos en la divisoria entre el Alto y el Bajo Nilo. La ocupación por los hicsos (pueblo guerrero que introdujo en el arte de la guerra el uso del arco compuesto y el carro tirado por caballos) de la ciudad de Tebas desplaza y somete al campesinado. Diez años más tarde, tras su reorganización en Nubia, Ahmose reconquistará Tebas y continuará hasta Hawaris (actual Tell el-Daba), ciudad de cuatro murallas con fosos entre ellas rellenos con agua desviada del Nilo. Ante la imposibilidad de asediarla y de cercarla ya que era una ciudad autosuficiente resolvió reconducir las aguas lo que provocó la capitulación de los hicsos y el fin de su rey Apofis, constituyéndose Ahmose en el iniciador de la Dinastía XVIII, la más brillante de la historia egipcia.

Inferno. August Strindberg

9788495359773.jpgInferno cuenta el entramado psiquiátrico que vive el personaje al saberse conocedor de su capacidad para crear oro a partir de otros minerales y el acoso al que es sometido por las situaciones inexplicables que lo rodean para desestabilizarlo.
Hay escritores que para crear esta dicotomía: escritor – personaje se embeben acudiendo a un manicomio, se aseguran entrevistas con psiquiatras, leen tratados al respecto y son tan capaces de idear el entramado de dudas, sofocaciones, ahogos, angustias, insomnio, pesadillas, ruidos inexplicables, presencia de invisibles, cinturones eléctricos y voces que vive una mente perturbada que logran meter al lector en otra realidad.
August no es que vaya más lejos, no es que sea un maestro del género. Inferno es simple y llanamente su diario.

Bomarzo. Manuel Mújica Lainez

bomarzo.jpgEl municipio de Bomarzo, se encuentra a unos 70kms de Roma, dirección Florencia. En su castillo, perteneciente a la familia de los Orsini, su propietario, Pier Francesco Orsini, jorobado, contrahecho, cínico e intrigante, allá por 1541 construyó en su feudo el Jardín de los Monstruos, formado por esculturas talladas en roca, que representan seres míticos y personajes fantásticos.
Manuel Mujica Lainez visitó el jardín por primera vez en 1958. Nace de esa visita la novela, de carácter histórico, que recrea la vida y obra del condotiero, contada en primera persona, bajo la protección de su carta astral, en la que se predice su inmortalidad, lo que facilita saltos históricos hasta la actualidad a pesar de que el grueso del argumento se mueve en el Renacimiento tardío italiano.
No es lectura que por su erudición obligue al uso continuo del diccionario pero despliega un exuberante uso del castellano que invita al placer de leer por leer donde palabras y frases se articulan con innumerables puntos, comas, agarradas a las páginas en largos párrafos tal y como lo hacen las enredaderas ayudadas por clavos y alcayatas en los jardines Bomarzo.

Peking by Night. Svetislav Basara

pekingbynight.jpgLectura rara. De esas que invita a pensar qué carajo tiene lo que estás leyendo que producido en esloveno ha llegado hasta el Puerto. También en su día muchos esperaron a un Godot que llegó de Irlanda pero que realmente nunca apareció. Así es el absurdo. Sin dejarse llevar por él será difícil degustar a Basara con sus juegos gramaticales, sus diatribas sobre el tiempo y los saltos de identidad entre el protagonista y el autor así como las puertas, tan absurdas, que un mismo objeto sirve tanto para entrar como para salir y sin embargo nos dejan en el mismo lugar.